El consumo total de bebidas refrescantes alcanzó a los 650 millones de litros en el primer trimestre de este año, cifra que representa un incremento de 4,7% respecto del mismo período del año 2010.
Este incremento se explica principalmente por el mayor dinamismo de la economía y de la demanda interna. El crecimiento económico y el mayor nivel de empleo tienen un impacto directo en el aumento del consumo, especialmente de bienes no durables y, por tanto, en la canasta familiar.
Este aumento también ha sido resultado del permanente esfuerzo de las compañías productoras por innovar en productos y en formatos, respondiendo a las necesidades del consumidor, especialmente con líneas que apoyan la Vida Sana.
Se destacó especialmente el incremento de la categoría bebidas para deportistas, representadas por las marcas Gatorade y Powerade, que mantuvo el ritmo ascendente que ha venido sosteniendo en el último año, con un crecimiento de 30,7%, totalizando los 3,6 millones de litros.
El crecimiento de esta categoría refleja la sofisticación que han alcanzado los consumidores, que hoy demandan bebidas específicas para cada necesidad y se explica asimismo por el cambio de tendencia de hábitos del consumidor cada vez más interesado en actividades deportivas.
Las bebidas para deportistas representan un 0,5% de las ventas, con un gran potencial de crecimiento.
Las bebidas gaseosas experimentaron un alza de 2,6%, llegando a 509 millones de litros y representan el 78% del total de las ventas de la industria.
Por su parte, las aguas (con sus tres variantes: minerales, purificadas y saborizadas) mostraron un crecimiento de 4,1%, totalizando un consumo de 84 millones de litros, que equivale a un 13% del total.
Lo que más sorprende es el incremento de la categoría bebidas a Base de Té, con alza de 53,7%, en el primer trimestre, con ventas de 1,31 millones de litros en el período.
